El mercado laboral es una arena de gladiadores para algunos en la que tienes que desplegar las mejores armas para superar a tus oponentes. ¿Por qué no huir de la competencia? ¿Por qué no aplicar la estrategia del Océano Azul?
Cuando te enfrentas a un competidor hay tres estrategias principales para derrotarlo: entablar una batalla frontal y despiadada, disuadirlo de luchar o llevarlo a otro nivel que le impida enfrentarse a nosotros.
Según Sun Tzu, la mejor manera de ganar una batalla es ganar sin pelear. Utilizando estos dos libros: The Art of War y Blue Ocean Strategy de Renée Mauborgne y W.Chan Kim podemos esbozar la mejor estrategia para los individuos y las empresas que desean superar a sus competidores.
Para que la gente se niegue a competir contigo, tienes que ser el doble de bueno.
En una pelea callejera, ¿qué disuade a un luchador de luchar? Lo más frecuente es que su oponente sea el doble de grande (o alto), el doble de técnico, el doble de rápido, el doble de experimentado, etc., o que decida no luchar limpio recibiendo ayuda de un compañero de lucha (el doble).
Lo mismo ocurre con la competencia profesional. Si has almacenado el doble de conocimientos, habilidades o destrezas en un área, crearás el mismo efecto con los potenciales competidores: no se atreverán a entrar en la carrera.
También puedes aplicar la punta del Océano Azul. En lugar de ser el mejor, lo cual viene a costa de luchas sangrientas, puedes simplemente ser diferente. Ser tan diferente que nadie pueda compararse contigo. Para hacer esto, debes aprovechar tu esencia, sólo tú puedes ser el mejor en ser tú mismo.
Observe, estudie todas las métricas de excelencia en su industria. Revise todos estos criterios en relación con su propia situación y evalúese objetivamente. Entonces vea cómo puede crear un criterio que aún no existe y que podría ser muy relevante para su diferenciación. Entonces, intenta ser el mejor en el nuevo criterio que creas mientras mantienes un nivel aceptable en los criterios convencionales para que no te descalifiquen. Una vez que haya desarrollado la nueva “receta” para usted o su empresa, podrá competir con la competencia que no podrá igualarle porque tratará de competir contra usted con criterios irrelevantes. Intente mantener esta ventaja comparativa única en secreto para mantenerse diferente de los demás durante el mayor tiempo posible.