Para resolver un problema, a menudo recurrimos al mismo tipo de solución. A menudo funcionamos como un mecánico con un solo destornillador para arreglar las cosas: queremos remendar algo con la única herramienta que creemos tener. Con este enfoque, no es de extrañar que nuestros esfuerzos sean ineficaces. Imagina tener que reparar objetos tan diferentes como un ciclomotor, un coche eléctrico o un radiador. Si sólo se utiliza una herramienta, se limita la capacidad de encontrar una respuesta a un problema. Pero si tiene una serie de herramientas a su disposición, tendrá las mejores posibilidades de éxito. Veamos las 3 herramientas que el ser humano tiene a su disposición para afrontar cualquier problema que se le presente.
La naturaleza humana puede describirse en tres dimensiones: el corazón, el intelecto y la voluntad. Cada uno de estos aspectos corresponde a una clave concreta.
La verdad (a través del esfuerzo), la clave de la voluntad
No es raro que para superar una dificultad haya que apelar a la verdad para encontrar un final feliz a una situación. La verdad se obtiene a menudo mediante un esfuerzo que implica ir más allá de las apariencias. En última instancia, es a través de la persistencia o la perseverancia como se superan muchos retos. Para trabajar con la verdad, hay que darse los medios para obtener esta médula sustantiva, lo que requiere acción y la voluntad de no renunciar a nada. La clave es ir en la misma dirección pero con más intensidad como un martillo neumático.
Un consejo para ayudarte a utilizar esta llave:
Para desarrollar tu fuerza de voluntad, puedes utilizar diferentes métodos. Tu fuerza de voluntad puede agudizarse mediante el deporte o el estudio intenso, por ejemplo. Puedes desarrollar tu fuerza de voluntad trabajando duro para superar una dificultad de forma regular. Para ello, puede decidir elegir algo que parezca un poco complicado o difícil de conseguir, hasta alcanzar el resultado deseado. Cuanto más lo hagas repetidamente, más aumentarás tu capacidad de esfuerzo para resolver un tipo de problema.
El amor, la llave del corazón
Vivimos en una época en la que el esfuerzo está en primer plano, por lo que este recurso no suele escasear. Sin embargo, si sólo utilizamos esta herramienta en todas las situaciones, podemos acabar como la mosca que sigue golpeando la ventana de nuestra habitación con la esperanza de salir, sin ver que hay una salida al otro lado de la habitación.
Por desgracia, hoy en día se descuida el corazón; con demasiada frecuencia queremos resolver un problema con un truco. Sin embargo, es a través del corazón donde se producen muchos bloqueos en las relaciones humanas. Cuando las cosas se atascan, no es raro que no hayamos conseguido ganar algo de altura y distancia. Cuando utilizas el amor para resolver un dilema, introduces aceite que te permite “engrasar” un mecanismo invisible. Un poco de amor abre la puerta del corazón, y a través de él se toman importantes decisiones en la vida.
Apelar a tu corazón es como mirar un problema desde un poco más lejos. Al levantar la vista, no es raro ver un detalle que salta a la vista donde antes hubiera pasado desapercibido. El símbolo de esta llave es el globo aerostático.
Un consejo para ayudarte a utilizar esta llave:
No es fácil pensar con amor, sobre todo cuando tienes delante a alguien que te ha hecho mal o te ha faltado al respeto. Sin embargo, siempre hay una manera de ver lo positivo cuando se piensa en alguien, sólo hay que tomarse la molestia de mirar más de cerca y apreciar las cualidades que no aparecen a primera vista.
La sabiduría, la clave del intelecto
La mente es una dimensión esencial en la resolución de un bloqueo. Nuestra sociedad no descuida este aspecto del ser humano, pero la gente a veces se olvida de utilizarlo para encontrar una salida a su situación. La sabiduría significa mirar una situación desde diferentes ángulos. Significa utilizar una herramienta para diagnosticar una situación de la misma manera que los talleres modernos pueden sondear un coche con un dispositivo que les proporciona un informe detallado de la situación del vehículo.
Un consejo para facilitarte el uso de esta tecla:
La sabiduría se desarrolla a través de tres cosas que son la acumulación de conocimientos, la reflexión asociada a esos conocimientos y la experiencia, es decir, poner esos conocimientos a prueba de fuego. Básicamente, para desarrollar su sabiduría, debe asegurarse de trabajar en uno de estos tres componentes. Puedes hacerlo leyendo y luego meditando sobre tus lecturas. Podrías pasear por la naturaleza para reflexionar de forma más distendida sobre las ideas que has encontrado. Por último, puedes poner en práctica estas ideas y ver qué resultados obtienes. Cuantos más conceptos acumules, más podrás utilizarlos para resolver futuros problemas.
En resumen:
Hay 3 llaves para abrir las puertas de un problema. A menudo, si te quedas atascado, es porque te has negado a utilizar las otras dos teclas, que siempre están a tu disposición.
- Estas claves se llaman esfuerzo, amor y sabiduría.
- Están simbolizados por el martillo neumático, el globo y la sonda, respectivamente.
- Cada una de estas teclas puede activarse de diferentes maneras.
- La clave de la fuerza de voluntad puede desarrollarse a través del hábito de superar obstáculos, como el estudio diligente o los deportes de resistencia
- La clave del amor se puede activar pensando en las cualidades de las personas con las que tratamos, aunque nos desagraden al principio
- La clave de la sabiduría se obtiene mediante la acumulación de conocimientos, la aplicación de la reflexión a esos conocimientos y la aplicación de esos conocimientos