Las relaciones humanas son inconstantes. Pueden ser la fuente de una gran alegría, de compartir, de esperanza y de satisfacción. Sin embargo, estos nunca están garantizados, pueden romperse unilateralmente sin su preparación. También es importante mantener estrechos lazos con las entidades celestiales; no te traicionarán mientras no te hayas alejado de la luz. La amistad con Dios es primordial. Es…
+